Desde el Departamento de Folklore se celebra el Día del Lunfardo, 5 de septiembre.
Buenos Aires tiene su propia jerga popular, el lunfardo, que no es un código secreto, sino un lenguaje cotidiano. Se suelen utilizar palabras como "bondi", "chabón" o "empilchado" en la vida diaria.
Cada 5 de septiembre se celebra el Día del Lunfardo en la ciudad. La fecha conmemora la publicación del libro Lunfardía de José Gobello en 1953, que impulsó el interés lingüístico en el lunfardo. El origen de la jerga se remonta a fines del siglo XIX en los sectores marginales de la sociedad porteña, por lo que no es casual que los primeros estudiosos fueran funcionarios policiales. La palabra "lunfardo" proviene del gentilicio "lombardo", que se asoció con la delincuencia debido a la actividad de usureros y prestamistas de los lombardos en el siglo XVIII.
Hoy se celebra el Día del Lunfardo
un dialecto que nació en las calles,
de Buenos Aires y Montevideo,
y se extendió por todo el mundo.
Con palabras y expresiones únicas,
el lunfardo nos hace bailar,
con su ritmo y su musicalidad,
es el lenguaje de la pasión.
Desde Carlos Gardel hasta Astor Piazzolla,
El lunfardo ha sido parte de nuestra cultura,
un reflejo de la identidad, de un pueblo apasionado y vibrante.
Que su legado siga vivo en nuestras bocas,
y que su espíritu nunca se apague.
(Anónimo)
Cada 5 de septiembre se celebra el Día del Lunfardo en la ciudad. La fecha conmemora la publicación del libro Lunfardía de José Gobello en 1953, que impulsó el interés lingüístico en el lunfardo. El origen de la jerga se remonta a fines del siglo XIX en los sectores marginales de la sociedad porteña, por lo que no es casual que los primeros estudiosos fueran funcionarios policiales. La palabra "lunfardo" proviene del gentilicio "lombardo", que se asoció con la delincuencia debido a la actividad de usureros y prestamistas de los lombardos en el siglo XVIII.
Hoy se celebra el Día del Lunfardo
un dialecto que nació en las calles,
de Buenos Aires y Montevideo,
y se extendió por todo el mundo.
Con palabras y expresiones únicas,
el lunfardo nos hace bailar,
con su ritmo y su musicalidad,
es el lenguaje de la pasión.
Desde Carlos Gardel hasta Astor Piazzolla,
El lunfardo ha sido parte de nuestra cultura,
un reflejo de la identidad, de un pueblo apasionado y vibrante.
Que su legado siga vivo en nuestras bocas,
y que su espíritu nunca se apague.
(Anónimo)